viernes, 24 de abril de 2015

De “Gato” histórico a un “Tigre” imparable

Galarraga utilizó el número “14” en seis de los nueve equipos con los que estuvo. 
Después de conectar dos cuadrangulares en la primera semana de la temporada, Miguel Cabrera empieza a coquetear con el record de Andrés Galarraga, quien posee la marca de mayor cantidad de cuadrangulares para un venezolano en las mayores con 399 en 19 temporadas.

Y es que a pesar, de la gran capacidad que posee Cabrera con el madero,  Galarraga no se la puso fácil a su compatriota, a pesar, de los numerosos obstáculos durante su carrera, “El Gato” marcó una época en la historia para los peloteros venezolanos en la gran carpa.

El debut de Andrés Galarraga en las Grandes Ligas, se dio el 23 de agosto de 1985 a sus 24 años de edad, con la franquicia actualmente desaparecida, los Expos de Montreal.

En su primer año el inicialista vio poca acción en las mayores, disputó 24 juegos. En su segunda campaña el “Gato” tuvo un gran arranque de temporada, sin embargo, comenzaron a aparecer las lesiones para el venezolano, que lo dejaron fuera de acción cuando sumaba 25 remolcadas, la máxima cantidad para un novato en ese momento.

Esa temporada el criollo sufrió dos lesiones, una en su rodilla y otra en su caja torácica. El venezolano selló un año con promedio de .271, en 105 juegos.

Empezó a mostrar el poder

El primer gran año de Galarraga fue en  1988, cuando dominó el departamento de imparables en el viejo circuito con 184, incluyendo 42 dobles, eso fue suficiente para cosechar su primer Bate de Plata en su carrera, convirtiéndose en el primer venezolano en conseguirlo. Además, fue llamado al primero de sus cinco juegos de las estrellas en esa temporada.

Andrés estuvo con la organización de los Expos sus primeros siete años en la Gran Carpa,  donde conquistó sus dos Guantes de Oro, los únicos en su carrera. Luego pasó a los Cardenales de San Luis donde estuvo una temporada sin mayor ruido, de ahí dio el salto a los Rockies de Colorado.

Su llegada al equipo rocoso se ve influenciado por su antiguo coach de bateo Don Baylor, quien estuvo sorprendido con la manera de batear del venezolano en su estadía en San Luis.

Cuando Baylor asume las riendas del Colorado, el dirigente recomienda al equipo firmar al venezolano, para reforzar la ofensiva de los rocosos.

Sus mejores años

En su primer año con el uniforme de los Rockies en 1993, el “Gato” fue convocado para el juego de las estrellas, con el pasar del tiempo Galarraga se fue ganando a la fanaticada de Colorado gracias a su producción con el madero, y junto a  Vinicio "Vinnie" Castilla, Larry Walker y Dante Bichette formaron una de las baterías más temibles de las mayores para ese entonces, ganándose el apodo de “Los bombarderos de la Calle Blake”.

En la temporada de 1995, los cuatro peloteros de los Rockies conectaron 30 o más cuadrangulares en una temporada, igualando a los Dodgers de 1977. Muchos analistas alegaban en ese momento, que la cantidad de jonrones de los peloteros  de Colorado se debía al estadio de los Rockies el Coors Field, este escenario es considerado uno de los parques que más favorece a los bateadores en las mayores.

En esa temporada del 1995, los Rockies avanzaron a la postemporada, luego de quedarse con el comodín de la Liga Nacional, sin embargo, cayeron en Serie Divisionales ante los Bravos de Atlanta.

Andrés Galarraga consiguió su segundo título de bateo en 1996, campaña que cerró con 47 jonrones y 150 remolcadas, y un average de .304. El inicialitas venezolano puso fin a su ciclo en Colorado en 1998.

Ahora es un Bravo

Al año siguiente el criollo llega a un acuerdo con los Bravos de Atlanta, equipo con el que logró conectar 44 jonrones en su primer año, y sumó un promedio de .305, se convirtió en el primer venezolano en registrar 40 jonrones o más en tres temporadas seguidas.

Su juego más importante

En 1999, Andrés Galarraga enfrentó su mayor batalla, al venezolano se le diagnosticó cáncer, luego de realizarse unos exámenes por unos dolores en la espalda. El criollo tuvo que someterse a tratamientos de quimioterapia para superar tal enfermedad y lograr volver al beisbol.

Durante su enfermedad el “Gato” recibió el apoyo de los Bravos de Atlanta, y la MLB.

Regresó el “Gato”

Luego de un año de ausencia y completamente curado del cáncer, Galarraga reapareció en el Turner Field, hogar de los Bravos de Atlanta, en el primer juego de la temporada 2000.

En la parte baja del séptimo inning de ese encuentro, el primera base sacudió un largo jonrón, acto que hizo levantar a la fanaticada de los Bravos para darle una gran ovación al inicialista por su regreso.

En esa temporada Galarraga acudió a su último Juego de Estrellas, y fue por segunda ocasión en su carrera Regreso del Año, convirtiéndose en el tercer pelotero que consigue tal galardón en las mayores.

Luego de estar con los Bravos de Atlanta, Andrés vistió el uniforme de los Rangers de Texas, Gigantes de San Francisco, Expos de Montreal y Angelinos de Anaheim.

El inicialista venezolano decidió poner fin a su carrera en el 2005, a pesar de estar en los campos de entrenamientos de los Mets de Nueva York  donde sonó tres cuadrangulares en la pretemporada, el “Gato” decidió anunciar su retiro después de 19 temporadas en el mejor beisbol del mundo.

De felino a felino


Como se mencionó al principio del texto, es cuestión de tiempo para que Miguel Cabrera supere la marca de Andrés Galarraga, y aunque el inicialista de los Tigres de Detroit está considerado como uno de los mejores bateadores de las mayores. No hay que dejar a un lado que el Gran Gato pudo registrar números importantes, y convertirse en uno de los venezolanos más significativo en las mayores, a pesar de las dificultades que presentó.

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